Chubascos
El sueño postergado
habla y se pegotea en
la orilla de la cama destendida.
se acurrucan los cansancios
y el letargo se convierte en monotonía.
caducamos desentendidos
por la magia de no extrañarnos.
Suficientes fantasías
para creer en las penumbras
de las fotosíntesis programadas
hipotéticas y soñadas en servicios
sencillos de laboratorios
confeccionadas por susurros telepáticos.