tu efluvio es de musiquita de videojuego,
de calma potente que imantaba y le ganaba a los miedos.
una mezcla de sonidos que abrigaban y atraìan eléctricos.
y me daban respuestas. no necesitaba hablar.
jamàs.
lloro la ausencia y me construyo sin presencias físicas.
no me soportan.
siempre me extraviaba en
todo el universo
de galaxias que bailaban en el humo
que salìa de tu boca.
y nacieron cuentos arropados en sueños,
y narraciones destructivas que daban paso a
los abrazos dulces. algodòn de azùcar fosforescente
cada vez que exhalabas sobre mi oìdo.
quizàs, trepada en alguna ramita que se
balanceaba, estaban las pistas para incendiar.
(pero decidiste ser la evidencia de otro dolor)
No hay comentarios:
Publicar un comentario