en
tus patrones
desorientados hay
apego de pensamientos.
pisàs la maleza sabiendo que
descanso en el pastizal
que trepa la chapa del auto
donde los pezones se erectan
por fricciòn ante la espera.
te veo pasar
y tu desdèn se alimenta
mientras todo se borra
y ya ni siquiera es verdadero
el mejor de los sentimientos que guardaba
en la guantera.
se van solos. te los llevàs y lo ofrendàs en otro lugar.
y la huìda tan hipòcrita y vil
desarma a la bondad mientras
el insomnio me cose fragmentos
del
puñal que dejaste en mis ojos, y que
me desangra
el creerte.
espectro de maldad ¿qué quisiste adjuntar en mis
ilusiones que eran para vos?
¿què tanta cobardìa se te despierta ante mi que ni siquiera supiste hablar?
y la lluvia llegò para purificarme y excitarme
fucsia y còsmica de tanto petricor.
para que te piense
en deseo de tibieza
y flores petrificadas.
siempre, pero siempre,
soñando que me abrazàs por la espalda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario